De los lápices a la tecnología
La historia de estas hermanas tocó el corazón del Gobierno del Cesar y les entregó dos tabletas para mejorar su proceso de aprendizaje.
Ana Agustina y Génesis Inés Díaz Reyes nacieron antes de tiempo, pues llegaron al mundo cuando solo cumplían cinco meses en el vientre de su madre y debido a esta premura nacieron en condición de discapacidad; sin embargo, Dios les otorgó el Don de cantar como los ángeles y el de ser acreedoras de una desarrollada inteligencia.
A sus 13 años de edad cursan tercer grado de primaria y ya se visualizan como unas excelentes profesionales.
Ana sueña con convertirse en fotógrafa para atesorar los recuerdos y Génesis se imagina como detective o maquilladora.
“Cuando escribo siento una felicidad. Yo escribo muy bonito y le ayudo a mi hermanita Génesis y cuando estoy con el celular porque mi maestra me enseñó, me aprendo el abecedario, la suma, la resta a multiplicar y eso me hace muy feliz”, dijo con felicidad Ana Agustina. Mientras que su hermana Génesis aseguró que “Me gusta aprender, me gusta sumar, multiplicar, me gustan las vocales. Es muy divertido la escuela. Me gustan los crayones, pintar, me gusta todo”. Ambas han logrado avanzar en sus estudios académicos teniendo como insumos un lápiz y un cuaderno.
La historia de estas hermanas tocó el corazón del Gobierno del Cesar y por eso decidió llegar hasta su hogar para hacerles entrega de tabletas con el propósito de que refuercen sus estudios, mejoren su calidad educativa y cumplan el sueño de ser profesionales.
Ayudas técnicas para facilitar vidas
El Gobierno del Cesar ha entregado cerca de 1.500 ayudas técnicas a la población en condición de discapacidad.
Con amor, empeño y dedicación trabaja el Gobierno del Cesar por la población en condición de discapacidad, debido a que su mayor objetivo es brindarles a estas personas las herramientas necesarias para mejorar sus condiciones de vida.
Entregarle las ayudas técnicas a la población con discapacidad es de gran beneficio para esta comunidad que anhela movilizarse con facilidad.
La Oficina de Gestión Social en su propósito de ayudar a los familiares o cuidadores en su proceso de cuidado ha entregado cerca de 1.500 elementos de apoyo, entre ellos: sillas de ruedas para adultos y niños, coches neurálgicos para niños y adultos, kit para invidentes, sillas de baño, colchones y cojines antiescaras.
Maira Cecilia Colmenares es madre de un joven de 19 años en condición de discapacidad, pero debido a la falta de una silla de ruedas se le dificultaba llevarlo a pasear. “Estoy agradecida por la silla, ya que con esto lo puedo sacar a mí hijo, siempre lo tenía en casa porque no tenía como sacarlo, tenía que cargarlo; entonces es buen beneficio”.
Así como Maira también se han beneficiado niños, niñas, jóvenes y adultos que requerían con urgencia que velaran por sus necesidades, ya que estas ayudas técnicas son indispensables para garantizar su bienestar.
‘Mis mejores años’ conserva el alma joven de los adultos mayores del Cesar
En ‘Mis Mejores años’ participan 13.100 adultos mayores distribuidos en 96 centros de vida del territorio cesarense.
Envejecer, pero conservando un alma joven, es uno de los deseos de la humanidad al llegar a la tercera edad; esta es una etapa en la que la nostalgia de los años enérgicos permanece en la memoria, el corazón y la piel que deja entrever el tiempo vivido.
Para mantener ese anhelo entre los adultos mayores del departamento del Cesar, nació el programa ‘Mis Mejores Años’, el cual le brinda a esta población la posibilidad de conservar la vitalidad de los años acaecidos. En este programa participan 13.100 adultos mayores que están repartidos en 96 centros de vida del territorio cesarense.
En estos espacios se les brinda una atención integral, permitiéndoles aprovechar el tiempo libre mediante actividades culturales, deportivas y apoyo psicosocial.